En Mykonos, el viento sopla todo el año. Esta es la razón por la que los arbustos son más abundantes que los árboles; esta es la razón por la que los patios están rodeados de altos muros; y esta es también la razón por la que los molinos de viento de Mykonos se han convertido en lugares emblemáticos de la isla.
No hay postal más icónica de Grecia que los magníficos molinos de viento de Mykonos. Sin embargo, molinos de viento hay en casi todas las islas Cícladas. Tampoco son sólo puntos de referencia turísticos. Los molinos de viento de la isla de Mykonos estuvieron activos y en funcionamiento hasta principios del siglo XX.
La anatomía del molino de viento
Según la tradición, el molino de viento de las islas Cícladas es un pesado edificio de tres pisos, de forma circular y hecho de piedra. Muchos tienen ventanas muy pequeñas y un tejado puntiagudo, a menudo de madera.
La parte superior de los molinos está formada tradicionalmente por doce aspas de madera, cada una con un ala triangular de un tejido muy resistente, normalmente la misma lona de algodón que se utiliza para las velas de los barcos.
Cuando sopla el viento, el molino transporta el movimiento a un eje central dentro del edificio, forzando a las muelas de abajo a un movimiento de rotación. Para aprovechar al máximo la fuerza de ese movimiento, el mecanismo de molienda solía estar en el piso superior, mientras que la harina se recogía en el segundo. La planta baja se utilizaba para almacenar el grano crudo y la harina procesada.
Iconos de Mykonos
En las islas del Egeo, los molinos aprovechaban el viento del norte, llamado Meltemi, para moler cebada, trigo y otros cereales de producción local. En Mykonos, la harina resultante se devolvía a los campesinos, que elaboraban su propio pan, o se vendía a los panaderos locales. Parte de esa harina también se enviaba a otras zonas de Grecia y, a menudo, al extranjero.
La historia nos cuenta que en Mykonos había más de 25 molinos de viento; diez de ellos formaban parte del complejo llamado Kato Mili, que significa los molinos inferiores. Estos molinos estaban situados frente al puerto de Alefkandra, y esta ubicación estratégica fue clave para el crecimiento económico de la isla.
El puerto era una parada obligada para los veleros que atravesaban las Cícladas, por lo que la harina procedente de esos molinos se utilizaba para producir rusks, o paximadi, una especie de pan seco que puede conservarse durante meses y que era la principal fuente de hidratos de carbono para los marineros.
Los Pano Mili, o molinos superiores, servían para lo mismo, pero la harina producida se consumía sobre todo localmente. La electricidad trajo nuevos avances y, en consecuencia, cesó la producción tradicional de harina. Sin embargo, aún quedan dieciséis antiguos molinos en la isla, la mayoría de ellos renovados y reconvertidos en tiendas o incluso viviendas.
Algunos aún son visibles cerca del casco antiguo, y los situados junto al mar son visitados por miles de turistas cada año. Algunas han sido renovadas y convertidas en casas modernas o alojamientos exclusivos. Todas ellas siguen siendo prueba del pasado agrícola de la isla.
Visite los molinos de viento de Mykonos
Actualmente sólo pueden visitarse dos de los molinos en pie de Mykonos. El molino Geronymos, que data de 1700, es el más antiguo de la isla, y produjo harina hasta la década de 1960. Ha sido renovado y la mayor parte de su maquinaria de molienda original sigue intacta.
El segundo molino de viento abierto al público es el de Bonis, y forma parte del Museo Agrícola de Mykonos. Este molino ha sido restaurado con gran respeto a su estado original.Aquí es posible acceder a los tres niveles y aprenderlo todo sobre el proceso completo de elaboración de la harina, desde la molienda de los granos hasta el pesaje y almacenamiento de la harina resultante.