Las Olimpiadas se fundaron hace más de 2.700 años en la ciudad-estado de Olimpia, situada en la unidad periférica de Élide, en Grecia. Los Juegos Olímpicos se disputaban normalmente cada cuatro años o una olimpiada. Además, unas 50.000 personas del mundo griego acudían a este gran evento que no solo era una fiesta deportiva sino también era religiosa celebrada en honor a Zeus. Durante la celebración de la competición se promulgaba la ékécheiria o tregua olímpica, que permitía a los atletas viajar en condiciones de seguridad desde sus polis hasta Olimpia.
Los antiguos Juegos Olímpicos eran bastante diferentes de los juegos modernos; había menos eventos y solo los hombres libres que hablaban griego podían competir, además de que se celebraban siempre en el mismo lugar. Tampoco había medallas de oro, plata y bronce; y los ganadores recibían una corona de olivo y la bienvenida a casa de un héroe. Actualmente, las olimpiadas se desarrollan en torno a las 2 semanas, pero ¿cuánto duraban los JJOO en la Grecia Antigua? Pues bien, duraban exactamente 5 días.
Los días de las antiguas Olimpiadas
Primer día
En este primer día, los atletas hacían sus primeras apariciones, principalmente para jurar lealtad al juego limpio; los jueces también debían comprometerse a mantener los Olímpicos libres de corrupción. Esta tradición aseguraba que los Juegos serían el mejor evento multideportivo del mundo conocido.
Segundo día
En este segundo día era la Hípica, muy populares en aquella época, la que daba inicio los acontecimientos deportivos. Había todo tipo de eventos, incluida la cuadriga, (una carrera emocionante y de alta velocidad en la que cuatro caballos tiran de cada carro; carreras de caballos montados y carreras de carros para caballos más jóvenes.
Ya por la tarde, tenía lugar el famoso pentatlón, que incluían las pruebas de disco, salto de longitud, jabalina, carrera y lucha. Esta era forma de medir la condición física y la capacidad deportiva de un atleta.
Tercer día
Este era un día de descanso y alegría general, sin eventos deportivos, en el que se realizaba un sacrificio de 100 bueyes como ofrenda al dios del cielo y el trueno, Zeus. Ese día, los alrededores del recinto olímpico se convertía en una barbacoa masiva.
Cuarto día
Para el cuarto día comenzaban las distintas pruebas de carreras a pie. La carrera de estadio era uno de los eventos más explosivos y, por lo tanto, más populares: un sprint intenso que se llevaba a cabo en una sola longitud del estadio, una distancia de aproximadamente 192 metros. Otro de los eventos populares es la carrera con armadura, en la que los atletas compiten llevando escudos, cascos y grebas.
Después del almuerzo, tenían lugar los deportes de combate, estos incluyen boxeo y lucha, así como pancracio. El pancracio en las olimpiadas era particularmente brutal, con muy pocas reglas que frenaban a los competidores. Las únicas restricciones que tenían los luchadores eran no debían morder a sus oponentes, perforar sus ojos, meterles los dedos en la nariz o apuntar a los genitales.
Quinto día
El último día de las olimpiadas ofrecía a los presentes la oportunidad de aplaudir a los campeones. Al ganador de cada evento se le presentaba la taeria, una cinta de lana roja que denota un campeón olímpico, además era coronado con una corona ceremonial de hojas de olivo. El resto de la jornada se dedicaba a celebrar las demostraciones de esfuerzo deportivo y gloria que los asistentes han presenciado en los días anteriores. Por último, los ganadores de los Juegos Olímpicos estaban invitados a un banquete exclusivo al que también asistían los jueces, así como una variedad de políticos y dignatarios.