El 10 de diciembre de 1963, el diplomático y poeta griego Giorgos Seferis recibió el Premio Nobel de Literatura de manos del Rey Gustavo de Suecia. Seferis fue el primer griego en recibir el preciado galardón.
Seferis nació en Urla, ciudad de Asia Menor, actual Turquía, en 1900. El poeta recibió una educación internacional. Su familia se trasladó a Atenas cuando él era un adolescente, y más tarde viajó a París, donde estudió Derecho en la Sorbona.
Mientras Seferis estudiaba en París, las fuerzas turcas incendiaron las secciones griega y armenia de la cosmopolita ciudad de Esmirna. Esto obligó a los griegos supervivientes de Asia Menor a huir de la región hacia Grecia.
Vida y su carrera de Giorgos Seferis
A pesar de no haber estado allí en ese momento, el suceso fue traumático y dejó huella en la vida y la carrera de Seferis. Toda su familia se vio obligada a abandonar la región, y el poeta griego no volvería a su tierra natal hasta más de 25 años después de la catástrofe de Esmirna.
Muchos atribuyen la fijación de Seferis por Odiseo, el antiguo héroe griego que se embarcó en una búsqueda de años para llegar a casa, al desplazamiento de los griegos en Asia Menor y a su propio anhelo de regresar a un hogar que ya no existe.
La catástrofe fue un momento decisivo para un gran número de escritores y artistas griegos de su generación, perturbados por la capacidad de destrucción y brutalidad del hombre, y cuyas ideas sobre la cultura y la identidad étnica se vieron trastocadas por la afluencia de millones de refugiados de la región.
Seferis se resistió a la Junta
Seferis se hizo diplomático y desarrolló una exitosa carrera en diversos países del mundo, como Turquía, Jordania, Albania e Irak. Cuando la dictadura militar, o Junta, tomó el poder en Grecia en 1967, Seferis comenzó inmediatamente a resistirse al brutal régimen. Habló públicamente en contra de la Junta, en un periodo en el que cualquiera que fuera considerado contrario a las ideas de la dictadura podía ser detenido, torturado, asesinado o exiliado.
Seferis murió en 1971, trágicamente sólo tres años antes del final de la Junta. Sin embargo, su funeral sirvió como acto de resistencia, ya que miles de dolientes llevaron su féretro por las calles de Atenas, recitando sus obras poéticas prohibidas por la dictadura.
Cuando Giorgos Seferis ganó el Premio Nobel
La poesía de Seferis se dio a conocer internacionalmente en la década de 1950. Fue nominado dos veces, en 1955 y 1961, antes de recibir finalmente el codiciado premio. El telegrama de la Academia Sueca del 24 de octubre de 1963 anunciaba que Seferis había ganado el premio «por su maravilloso estilo lírico, inspirado en un profundo sentimiento por el ideal cultural griego«.
Seferis, que en aquel momento estaba postrado en cama en su casa a causa de su mala salud, declaró: «Al seleccionar a un poeta griego para el Premio Nobel, creo que la Academia Sueca quiso expresar su solidaridad con la Grecia viva y espiritual, la Grecia por la que han luchado tantas generaciones, tratando de mantener viva su larga tradición cultural. También creo que la Academia Sueca quería demostrar que la humanidad de hoy también necesita poesía -de todos los pueblos- y el espíritu griego«.
Seferis competía por el Nobel de ese año en un campo de escritores estelares entre los que se encontraban gigantes de la literatura. Algunos de estos gigantes eran el dramaturgo irlandés Samuel Beckett, el poeta angloamericano W.H. Auden y el poeta chileno Pablo Neruda.
En la ceremonia del 10 de diciembre en el Ayuntamiento de Estocolmo, Seferis habló de la continuidad directa e ininterrumpida de la lengua griega desde la antigüedad hasta nuestros días.
Afirmó: «Pertenezco a un país pequeño. Un cabo de piedra en el Mediterráneo, que no tiene más bien que la lucha de su gente, el mar y la luz del sol. Nuestro país es pequeño, pero su tradición es enorme y nos fue entregada sin interrupción. La gente nunca dejó de hablar la lengua griega. Tuvo sus alteraciones, como todo lo que está vivo, pero no hay lagunas en su existencia«, señaló.
También se refirió a la necesidad y la función de la poesía en el mundo moderno: «Es importante que Suecia haya querido honrar esta poesía, y toda la poesía en general, aunque se dirija a un número limitado de personas«. Seferis concluyó diciendo: «Creo que este mundo moderno en el que vivimos, lleno de miedo y ansiedad, necesita poesía«.
Obra de Giorgos Seferis
Para explorar la obra de Giorgos Seferis, te presento un ensayo clave en castellano. Este aborda su poesía, vinculándola con su vida, así como con los eventos políticos e históricos del siglo XX. El análisis poético es esencial para los nuevos lectores y sintetiza el conocimiento para los expertos.